Para proteger la comunicación realizada entre dos personas a través de internet, lo usual es emplear aplicaciones que cifran -o lo que es lo mismo, encriptan- los datos intercambiados. Igualmente, la técnica es usada para evitar que archivos y carpetas puedan ser leídos por personas no autorizadas.
“El cifrado es la conversión de datos de un formato legible a uno codificado, que se pueden leer o procesar solo después de haberlos descifrado”, sostiene Marco Veloso, gerente comercial de Avantic. Así, con el encriptado “los datos quedan ilegibles para cualquier persona que pudiera interceptar el tráfico de la aplicación y capturar la información sensible que pasa por ella”, explica Leonardo Granda, manager de Ingeniería de Sistemas en Sophos.
Mucha de nuestra comunicación está encriptada, aunque no lo sepamos. Granda agrega que “las aplicaciones que manipulan información sensible cuentan con un mecanismo de cifrado por defecto – apps bancarias, de pago, de correo- y algunas de chat, como WhatsApp y Telegram”.
Mientras WhatsApp está encriptado por defecto de extremo a extremo -o sea, de usuario a usuario-, Telegram ofrece el cifrado de extremo a extremo como opción, siendo estándar el encriptado entre el usuario y el servidor.
El ejecutivo de Sophos añade que “para la comunicación entre un computador o un servidor y una web, los sitios que manejan información sensible usan un certificado SSL (por eso vemos ‘https’ en lugar de ‘http’)”, por lo que, en teoría, “nadie podría ponerse entre mi navegador y el sitio en cuestión y robar o modificar mis datos”.
Pero agrega de inmediato que aquello “es una verdad a medias, ya que existen vulnerabilidades en los navegadores que podrían explotarse para robar información”.
Diego Macor, SW Solutions Sales Manager de IBM Security para Sudamérica hispana, señala que también se usa el encriptado para la firma digital, las redes privadas virtuales e incluso se pueden cifrar archivos y discos duros.
“Las bases de datos Oracle utilizan robustos mecanismos de encriptación tanto para datos en reposo como para los que van en movimiento”, asegura Javier Ferraro, experto en ciberseguridad de Oracle Chile.
La situación de las apps más populares
Las apps de mensajería más usadas difieren respecto del encriptado. “WhatsApp hace un par de años implementó el cifrado de extremo a extremo, en el que ni siquiera la empresa puede tener acceso a nuestras conversaciones”, indica Veloso.
Para el experto, no obstante, aquello podría no bastar. Recuerda “el caso del exjefe de campaña de Trump, Paul Manafort: el FBI recopiló información desde sus mensajes de WhatsApp”. En efecto, esos mensajes fueron obtenidos desde iCloud, donde el usuario puede elegir hacer copias de respaldo, que no están cifradas -tampoco las hechas en Google Drive-.
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