Hoy existen diversas posturas respecto de qué deben ver o no ver los niños y adolescentes en internet, ya sea a través de un smartphone, tablet o computador. Y es que la libertad que ofrece un dispositivo conectado permanentemente a la red conlleva riesgos y peligros que afectan en mayor medida a aquellos usuarios menos expertos.
En este ecosistema, los padres juegan un rol clave y deben convertirse en un buen modelo a seguir en el uso de internet y las redes sociales para sus hijos. Así lo señala María Soledad Garcés, profesora especializada en Convivencia Digital y asesora de Contenidos de VTR. “De acuerdo a cómo los papás usen la tecnología, se trazará el camino de sus niños. Por eso deben ser modeladores y formadores, ya que ellos son los encargados de mediar la experiencia digital de los menores, estableciendo los límites de uso de acuerdo a la edad y necesidades de cada uno”, explica.
La experta agrega que, cuando son pequeños, el papel de los padres radica principalmente en regular el tiempo de acceso y supervisar que los contenidos sean apropiados para su edad. En tanto, cuando crecen y reclaman mayor autonomía, resulta elemental preocuparse de su salud mental y física. Por ello, la mediación parental debe ser más cercana y basada en el diálogo más que en el control.
Ángela Guzmán, directora del Departamento de Psicología de la Facultad Ciencias de la Educación de la Universidad San Sebastián, es clara y directa en decir que el rol de los padres siempre debe ser educativo, más que de control, limitación o prohibición. Según la docente, se trata de acompañar a los hijos y mostrarles qué es correcto e incorrecto. “Por lo general, en la casa el niño entra a internet para jugar, ver redes sociales o hacer sus tareas. Ahí es aconsejable que la navegación no sea totalmente libre y que esté bajo el resguardo de un adulto, para que vea qué páginas visita el menor y pueda guiarlo en cuanto alos sitiosy juegos online a los que puede acceder”.
Por su parte, Mónica Peña, académica de la Facultad de Psicología de la Universidad Diego Portales, explica que los padres deben cumplir tres roles principalmente: vigilar el acceso a internet, combinado con una perspectiva dialogante y abierta a las dudas de los niños respecto del ingreso a la red; supervisar los contenidos que ven los menores, y sus posibles efectos en ellos; y entender bien cómo funcionan las redes sociales.
“Los padres deben conocer las diferencias que existen entre las distintas redes sociales respecto del tipo de contenido que toleran y aceptan, por ejemplo. Twitter y Tumblr son tolerantes con el contenido pornográfico; no así Facebook o Instagram, pero estas son plataformas que tienden a estresar a las personas en razón de los ‘likes’ u otras interacciones”, dice Mónica Peña.
Los principales peligros en línea y cómo enfrentarlos
Las expertas coinciden en que los menores no perciben las consecuencias de los peligros a los que se exponen mientras navegan en internet. Y uno de los principales problemas hoy en día tiene que ver con la edad de los niños que acceden a redes sociales como Facebook o Instagram. “Son redes con restricción de edad en su uso e ingreso, pero si son para mayores de 13 años, muchas veces hay menores de 9 y 10 años en ellas y no saben quiénes están detrás de las mismas”, alerta Ángela Guzmán de la Universidad San Sebastián.
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